Esta finca está ubicada entre Sóller y Port de Sóller a pocos minutos andando a la playa y los restaurantes.
Ha sido recientemente renovada por completo. Equipada con la última tecnología, techo nuevo con aislamiento, ventanas de madera con doble acristalamiento, preinstalación de aire acondicionado y una moderna cocina, la casa ofrece mucho confort de vida.
En el sótano hay un lavadero.
En la planta baja hay un gran salón-comedor, una moderna cocina y un dormitorio. La chimenea no está conectada, pero hay una preinstalación para una estufa de leña.
En la planta superior hay dos dormitorios y dos baños con ducha, uno de ellos en suite.
Además del agua del pueblo, también hay agua del pozo propio, que se utiliza para el jardín.
La renovación es de alta calidad y se han conservado varios elementos históricos y tradicionales que añaden encanto a la casa.
La propiedad todavía ofrece muchas posibilidades de diseño, al igual que el gran cobertizo agrícola adyacente.
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Pueden existir posibles cambios en el precio.
